Altos de Chavón es tan romántico como inolvidable
Posiblemente la atracción histórica más popular en La Romana, Altos de Chavón se alza sobre una meseta con vista al río Chavón.
Su aspecto de pueblo mediterráneo del siglo XVI fue concebido por el escenógrafo italiano Roberto Coppa, quien supervisó de cerca su construcción, cuidando la colocación de cada piedra. El estilo era de Coppa, pero fue la visión y el apoyo del industrial estadounidense Charles Bluhdorn la que convirtió este lugar en un tributo vivo y duradero al arte, la cultura y la educación de la República Dominicana.
Cuenta la leyenda que el proyecto comenzó en 1976, cuando la construcción de una carretera cerca del río Chavón explotó y se convirtió en una montaña de piedra. En ese momento, la empresa estadounidense Gulf + Western Industries era dueña de la propiedad Altos de Chavón, y Bluhdorn, su presidente y CEO, tuvo la idea de utilizar las piedras creadas por la explosión para construir una aldea. Se imaginó creando una villa de artistas al estilo de St. Paul de Vence, en el sur de Francia. Y así comenzó la construcción, y se completó a principios de la década de 1980.
Aunque G+W vendió sus activos dominicanos a un consorcio en 1983, la hija de Charles Bluhdorn, Dominique, se quedó y hoy es la presidenta de la Fundación Centro Cultural Altos de Chavón, una organización benéfica que comprende una galería de arte, un programa de artistas en residencia, el Museo Regional de Arqueología Altos de Chavón y la Escuela de Diseño de Chavón. El campus de la escuela La Romana, en Altos de Chavón, es donde se enseñan bellas artes y cine. El otro campus de la escuela, ubicado en la ciudad capital de Santo Domingo, es el sitio para estudios de diseño de moda, diseño de interiores y diseño de comunicación. La Escuela de Diseño está afiliada a la Escuela de Diseño Parsons en Nueva York desde 1983.
Para conocer realmente Altos de Chavón, deambule por sus estrechos senderos de adoquines, mirando las paredes de estuco, las linternas de hierro forjado, los exuberantes jardines y las enredaderas en flor que escalan paredes enrejadas y arcos en lo alto. Descubra sus pequeños cafés y restaurantes internacionales, y visite las tiendas de artesanías, donde podrá encontrar piezas económicas y joyas finas, además del trabajo de artesanos locales. No se pierda la galería de arte, que exhibe el trabajo de artistas y estudiantes invitados de la Escuela de Diseño, o la colección de artefactos precolombinos del Museo Regional de Arqueología, desenterrados en las áreas circundantes.
Chavón también cuenta con tres talleres de artesanía: uno para objetos de cerámica tanto utilitarios como decorativos, un estudio de tejido, donde el algodón nativo se coloca en manteles, manteles, alfombras, bolsos y tapices, y un taller de serigrafía, donde las camisetas se adornan con diseños y los artistas pueden producir múltiples piezas de su trabajo. Los tres talleres están abiertos al público.
Un espacio con valor arquitectónico en la comunidad es la hermosa Iglesia de San Estanislao, que lleva el nombre del santo patrón de Polonia en homenaje al Papa Juan Pablo II, quien visitó Santo Domingo en 1979 y regaló una reliquia del santo a la iglesia. La iglesia da a la Fuente de los Cuatro Leones y a una plaza de mosaicos de piedra de río que es un lugar popular para bodas. En esta iglesia, el 6 de noviembre de 2004, el príncipe español Luis Alfonso de Borbón, duque de Anjou, se casó con la heredera venezolana María Margarita de Vargas y Santaella.
El sorprendente anfiteatro de 5,000 asientos de Chavón ha tenido una ilustre lista de actos musicales. Sinatra y Santana inauguraron el lugar en 1982, y desde entonces artistas de la talla de The Pet Shop Boys, Sting, Caetano Veloso, Charles Aznavour y Julio Iglesias, por nombrar algunos, han pasado por allí.
Para la vida nocturna está Genesis, la discoteca de Altos de Chavón, un lugar popular para visitantes, residentes de villas y huéspedes de Casa de Campo. Completando la escena musical de la noche están Onno’s y Good Vibes, abiertos hasta altas horas de la madrugada.
Altos de Chavón es indudablemente pintoresco, con su vista panorámica del río Chavón, los ondulantes greens del campo de golf Dye Fore de Casa de Campo y las montañas en la distancia. En el fresco rubor de la luz del amanecer y en el suave calor del resplandor carmesí del atardecer, Altos de Chavón es tan romántico como inolvidable.
